Este presente análisis se centra en varios aspectos críticos relacionados con el proceso de selección, reclutamiento y permanencia de los policías de investigación, así como en las condiciones de trabajo de estos servidores públicos esenciales en el orden público y la procuración de justicia en el Estado de Guerrero. Es evidente el reto que conlleva para los policías investigadores ministeriales la realización de sus funciones, cuando son el primer eslabón y el más débil de la cadena, son los que están en constante interacción con la ciudadanía. Estos servidores públicos suelen ser señalados por la sociedad debido a la presunta violación de los derechos humanos y actos de corrupción. Este contexto pone a prueba la ética policial y la efectividad de la formación inicial recibida en la academia, la cual está a cargo del Instituto de Formación Policial. La confianza en la policía es crucial para su legitimidad social.